PASTORAL
La Madre Dolorosa acoge a los niños de Primero de Básica
Redacción: Blanca Sotalín, pastoralista.
Los pequeños se van preparado con mucha alegría y entusiasmo para entregar su vida a la Madre Dolorosa. Saben y experimentan día a día el amor de Madre, la protección y el cuidado que la Virgen María ofrece a cada persona y a sus familias.
Compartimos varios encuentros en los que reflexionan sobre la Familia de Jesús, logrando descubrir la riqueza que envuelve la dedicación, paciencia y entrega de María en la familia de Nazaret y la trasladan a cada una de sus casas; le cuentan sus problemas, sus penas, como también sus alegrías, le hacen confidente de sus pequeñas travesuras y muchas veces le piden cosas simples que nos estremece el corazón. La familiaridad con la que los pequeños se comunican con Ella nos abre los ojos del alma y nos enseñan que EL AMOR SE CONSTRUYE CON LA SENCILLEZ DE LAS COSAS. Les agrada preguntar sobre los motivos que le mueven a María a ayudar a las personas y ellos mismos se responden: ¡Porque tiene a Dios en el corazón! Reflexión que ni el más preparado teólogo pudiera responder.
De esa manera se comprometen a ser como María: servidora, obediente y cariñosa en cada hogar, y como muestra de que son sinceros en lo que ofrecen, en los encuentros expresan en lo que ayudan en sus familias; es una verdadera lluvia de actividades que se vive en cada hogar: “¡lavé los platos¡, y pedí que me pongan un banquito, porque todavía soy chiquito”; “¡yo doblé la ropa! paso a pasito, pero no me salió muy bien que digamos”; “¡hice un pastel súper rico para que se coman mis hermanos y mis papitos!”; “¡yo recogí las cositas que hace mi perrito, pero me tuve que poner doble mascarilla por el olor feo, pero sí me aguanté!”. Y un sinnúmero de actividades dignas de admiración que se pueden hacer a su corta edad.
Esa es la manera en como los pequeños se preparan para su entrega a la Virgen María. Comprendiendo que no solo es asistir a una celebración, sino que la vida debe cambiar para estar siempre en presencia de María.
El día de la Presentación ofrecen una flor blanca en representación de sus corazones que son blancos y delicados. Y María los acepta y acoge en sus brazos para nunca abandonarlos y caminar con ellos en las buenas y en las peores de la vida.
En tus manos dejamos a nuestros pequeños para que con tu ejemplo PUEDAN SER MÁS PERSONAS PARA SERVIR MEJOR. Cómo tú nos enseñas. Y recordemos que dónde está MARÍA, está JESÚS.